María Bardem (1954) es la primera hija de Juan Antonio Bardem y María Aguado. Desde joven el oficio familiar no le interesó demasiado, a pesar de haber coincidido más que sus hermanos con sus abuelos Matilde Muñoz Sampedro y Rafael Bardem. Después de hacer sus estudios básicos en el colegio Santa María del Camino, empezó la carrera de Psicología en la Universidad Complutense. Sin embargo, una urgencia por independizarse económicamente le llevó a pedirle trabajo a su padre, quien le dio a elegir entre los departamentos de montaje o script, dos oficios históricamente feminizados y cercanos a la experiencia de María, quien ya había asistido a las rutinas de la montadora Madame Ochoa o de la script Carmen Pageo en las visitas a los rodajes de su padre. El poder del deseo (J.A. Bardem, 1975) o Yo soy fulana de tal (Pedro Lazaga, 1975) serían sus primeras incursiones como meritoria, para seguir con Borrasca (Ángel Rivas, 1978) o El Puente (J.A. Bardem, 1977), a las que se sumarían otros títulos junto a su padre como 7 días de enero (1979), Lorca muerte de un poeta (1987-1988) o El joven Picasso (1993). Comenzará así una profesión a la que ha dedicado su vida y con la que ha coincidido también con sus hermanos Miguel (como en La madre de 1995 o Más que amor, frenesí de 1996) y con otros profesionales como Alex de la Iglesia (El día de la bestia, 1995) o Julio Medem (Ma ma, 2015). Habiendo trabajado para cine, televisión (codirigió La noche del cine español en 1986) y publicidad, en 2017 recibe el homenaje que la Academia de Cine dedica de manera anual a profesionales de gran recorrido pertenecientes a oficios no contemplados dentro de las categorías de los Premios Goya. Ella es la tercera script en recibir este homenaje. Actualmente combina los rodajes con las clases que imparte en instituciones como la ECAM, TAI o el Instituto de Cine.